ASI ES LA COSA, MI HUGO.
Esta sonándo la flaúta  del enemigo, los traidores asoman de sus grietas dispuestos a servirle al amo, una que otra alimaña nueva, queriendo hacer puntos para ser el nuevo corrupto a cargo.  Pero vos no te amilanes mi Hugo, porque la historia de los pueblos no se equivoca, quienes aún gozamos del derecho de pensar libremente, sabemos que tu esfuerzo es heroico, noble y muy importante porque es el principio de lo que tendrá que venir irremediablemente.
Venezuela, la bonita de America, tu novia mi Hugo, como duéle saber que la garra del aguila se incona contra ella, en su intento por librarse de la dependencia y de la miseria.  Nosotros los que amamos la libertad tenemos fé en el puéblo venezonalo, en ese noble puéblo que sabe de realidades y de pobreza, los millones de venezolanos que viven asinados en areas marginales, que forman la torre de la miseria y la desesperanza, en esos hombres y mujeres que se aferran a tu mano y a tu bandera con fé de vida y ansia de libertad, en ellos confiamos, en el verdadero puéblo de Venezuela, que vé con ojos de gratitud, como les has devuelto de alguna manera su soberania, como has ido reduciendo esa cadena con que atan a los que nunca han tenido nada.  Tenemos fé en los que estan dispuestos a todo por preservar el sueño de Bolivar.     
Porque el pueblo de Venezuela no es sólo esa mugre social advenediza que se pega a la corrupción de tus enemigos como mohó, ni son esos carteles del crimen a los que arrancaste por la fuérza el destino de la patria, tu pueblo es ese que espera ver abrirse las alamedas por donde vio Allende pasar al hombre libre.  No los que gritan en tu contra,  no los que agitan banderas y suénan cacerolas, tratando de confundir a tus fieles, patrocinados por el dollar. No compañero, no es tu puéblo el que exige regresar al pasado. Los que lloran su derrota son los traficantes de drogas, los que lavan dinero del narcotrafico, los agiotistas y los corrompidos; son tus enemigos, los enemigos de la libertad y la soberania de Venezuela, ellos son porque no soportan la luz, ellos no pueden soportar la honestidad y la rectitud, por eso se venden al de siempre, más ahora que se sienten apoyados por la estupida violencia de los testaferros del norte.      
Asi lo hicieron con Guatemala, lo mismo con Chile y Argentina, buscaron al traidor capaz de dejarse vejamenar a su sabor y antojo, buscaron al incapaz que cumpliera su tarea de traicionar a su nacion sin decir amén.  Es el mismo discurso del expansionismo, la misma perorata de siempre, los medios de comunicacion que son de su propiedad se encargan de difundir la mentira al mundo, azuzan la ira de los cobardes hechandole hojitas a la llama que han prendido.
Pero vos no podes quedarte atras mi Hugo, hay noches largas y las hay tristes pero hay dias hermosos y mañanas de infinito cielo azul, a nosotros nos corresponde  la luz, el camino abierto del futuro, la historia verdadera de las liberaciones, sólo debemos cuidarnos de no cometer los mismos herrores del pasado, al no dejar defender a las masas su liberación, se hizo eso en el 54 en Guatemala, por miedo a no arriezgar a los inocentes los dejamos a merced de los asesinos que en diez años casi alcanzaron el medio millon de muertos, entre desaparecidos, ajusticiados extrajudicialmente, o masacrados, medio millon de gente buena que fue asesinada brutalmente, sin que pudieramos hacer mucho por ellos,  los pueblos tienen derecho a saber la verdad y a defender su libertad, cada hombre noble es un soldado, hay que armarlos y dirigirlos para que reduscan a los traidores, el pasado debe de enseñarnos cuál es la mejor estrategia.     Tambien Allende no dejo al pueblo Chileno defender su revolucion y corrieron la misma suerte, Pinochet se encargo de asesinar a los dignos y a los adelantados de la tierra de Neruda. En Argentina, en Bolivia, en Colombia, Panama, Perú y Nicaragua mas recientemente, este mismo enemigo derrocó revoluciones, quitandole la oportunidad a los pueblos de generar su propio futuro.  Pero esta vez no sera asi, estos no son los mismos tiempos, no son los mismos hombres y no tienen ya la misma fuerza, hay que olvidar el miedo y combatirlos, debemos defender el derecho que tienen nuestros pueblos, con todo, con  la misma vida si es preciso.
No te preocupes mi Hugo, tu pueblo no lo dejara solo, dales con qué y como y ya veras como tiemblan los cobardes que se escudan en la mentira y la traición, no les des la espalda, ni la oportunidad de confundir a los mas vulnerables, debese sentar un presedente, castigar a los enemigos de la patria en forma contundente y ejemplar.  
Yo se que ud. puede hacer eso señor presidente y compañero, toda America espera de Venezuela un sacrificio glorioso.  Hay que desnudar la verdad de los enemigos, hacer que nuestra gente comprenda que los banqueros, los ricos y los corruptos jamás buscaran el bien de todos, ellos solo saben jalar agua para su molino, quieren llevar a Venezuela al fondo, como lo han hecho ya con Argentina y en donde los mas sufridos son los de siempre. Debemos darles esa oportunidad a nuestros pueblos, que puedan rechazar el capitalismo decadente y construir un mundo multipolar diferente.      
Es importante que el mundo se entere de que Venezuela no es ese montón de edificios bonitos que sacan los telenoticieros y los programas turisticos en el mundo, es solo parte de la gran nacion de Bolivar, Venezuela es más que eso, es un cielo azul con una hermosa tierra verde, con hombres buenos que la cultivan con amor, con mujeres hermosas que quieren construir para sus hijos un futuro duradero y mejor, gente que ha sido olvidada por los magnates del hambre, hijos de Venezuela que por fin han recibido la esperanza de ser tomados en cuenta, ellos son Venezuela y representan más del sesenta por ciento de la poblacion, ellos son los que deben decidir el futuro de la nacion y ellos los que la defenderan a muerte y de hecho ya lo hicieron cuando derrotaron a sus enemigos al elegir al gobierno de revolucion Bolivariana. Adelante Venezuela, adelante Hugo Chavez  porque estan muy cerca de escapar del laberinto del hambre, donde han puesto los oligarcas del capital a toda America Latina, estan a unos pocos pasos de alcanzar la libertad definitiva y darle la oportunidad a los demas paises de la patria Bolivariana.      
Siga adelante mi compañero presidente, que no le tiemble la mano cuando tenga que señalar a los enemigos de la libertad o castigar a los traidores, ud. es el guia de su pueblo y estoy seguro que su libertador, pero no retroceda, no se deje chantajear, los enemigos de nuestros pueblos, estan condenados a desaparecer, se desborona el gran imperio, hay fisuras en el cimiento del capitalismo aplastante, Sostengase compañero, apoyese en los hombros de los libertadores de nuestra gran nacion, de los que jamas hemos dejado de luchar esta guerra necesaria.   Adelante Hugo Chavez hasta la victoria siempre unidos.
Julio Zamora.

 Otro mundo es posible

Rosa Miriam Elizalde
subedit@jrebelde.cip.cu

Alguien dijo: "Revolución, mundo al revés; peligroso, contagioso mundo al revés". Los que venimos de Cuba hemos descubierto hace ya tiempo que la Revolución no es una fecha, ni un instante de una época, ni un cumpleaños de la nostalgia. La Revolución es poner patas arriba al mundo todos los días, es sufrir como propia la injusticia cometida contra otros eso nos enseñó el Che, y padecer en sí el sufrimiento de los demás esto nos lo está diciendo Fidel.

En estos meses de terrorismo imperial, cuando la atención del planeta es absorbida por las versiones informáticas de la muerte y por las imágenes concretas del horror, la gran prensa ha silenciado el más transgresor de los procesos que haya emprendido jamás la Isla hereje del Caribe, y que hemos bautizado como Batalla de las Ideas, o lo que es lo mismo, hacerle una Revolución a la Revolución para completar su destino: que el ser humano y no el dinero esté en el centro de todas las decisiones.

Llegamos a la Batalla de las Ideas después de entender que no basta con tomar el poder y dictar leyes socialistas que declaren que todos los hombres y las mujeres somos libres, iguales y fraternos; prohiban el racismo y la exclusión social, y reivindiquen la dignidad humana. Ya es un paso importante que estas leyes se institucionalicen y garanticen la equidad para la abrumadora mayoría de la sociedad. Es una suerte que, por más de cuatro décadas, al menos en un rinconcito de América Latina un país haya podido probar que libertad y justicia no son meras cuestiones semánticas, sino derechos inalienables de los pueblos.

Pero la justicia no llega por decreto, no se instala en masas abstractas, en multitudes sin rostro. La justicia es aquel hecho concreto que le permite a cualquier ciudadano, esté donde esté, sea quien sea, ser pleno y crecer espiritualmente. No es solo educación y salud para todos, es cultura y oportunidades para todos. La justicia es que el Estado toque a la puerta de cada casa y pregunte qué falta para vivir con dignidad, que se duela de los problemas más íntimos de la gente, que los comparta y los alivie, que esté más cerca de quien más lo necesita.

Una de las claves de este momento y que habla de la esencia profundamente revolucionaria de lo que estamos haciendo, se la escuché al propio Fidel en una reunión con estudiantes universitarios: "Una persona puede ser abandonada hasta por la familia, pero jamás por la Revolución". Eso significa que el Estado atienda con particular énfasis los sectores más vulnerables de la población, aquellos que por diversas razones sociales, familiares, económicas están en desventaja si se comparan con el resto de la sociedad, en un contexto en el que todavía sobreviven expresiones de marginación heredadas del capitalismo y un período especial que ha traído desigualdades en los ingresos y problemas de todo tipo, aún cuando las principales reivindicaciones sociales fueron mantenidas contra viento y marea.

La Batalla de las Ideas incluye, entre otras concepciones, un rediseño social que va a garantizar que todos los niños y los jóvenes de Cuba, cualquiera que sea el nivel cultural de sus familias, el lugar donde vivan, las herencias sociales que reciban, puedan tener todas las garantías para desarrollar su talento y multiplicar su capacidad creadora, lo único que puede transformar verdaderamente al hombre y lanzarlo más allá del egoísmo.

Por supuesto, semejante concepción que protagonizan los jóvenes es una carretera de dos vías. No solo parte de entender la solidaridad a la manera del Che, "como el único modo de expresar el amor en forma concreta", sino una fórmula muy atractiva para multiplicar el empleo juvenil y asegurar que quienes participen en estos proyectos sociales reciban, a su vez, un boleto a lo que también el Che llamaba el "alucinante viaje del yo al nosotros". Solo se puede recibir, dándose; solo es posible el socialismo con la transformación radical de la conciencia, con la fe absoluta en una nueva condición humana.

Pero, por otro lado, lleva implícita otra certeza: en una sociedad verdaderamente justa es inconcebible la exclusión y la marginalidad.

Y ustedes dirán que esto es ciencia ficción, que no tiene nada que ver con la realidad de un mundo en el que se educa a los jóvenes para el olvido, donde se le bombardea incesantemente con el ruido y la imagen para ejercer sobre ellos el "práctico oficio de lavar las conciencias", como ha llamado a este proceso un gran periodista argentino, Osvaldo Bayer.

Hay problemas, contradicciones, críticas e insatisfacciones en Cuba, pero también y por eso puede presentarse como referencia en el Foro Social Mundial este tipo de debate y de ejecución de proyectos que demuestran que la sociedad cubana sigue aspirando a crear uno, dos, tres, muchos Guevaras, y continúa defendiendo la idea de Séneca de que "el ser humano es para el ser humano algo sagrado", que el trabajo no es una condición accesoria para la felicidad y que el socialismo es una alternativa cierta en la lucha por hacer de este mundo una casa habitable para el género humano.

Por supuesto, el bloqueo sigue vivito y coleando, y nos satanizan los tirios, y a veces los troyanos, pero en medio de los fogonazos y de los estruendos que ayer nos llegaban de Afganistán y mañana pueden sentirse en cualquiera de nuestros adoloridos pueblos del sur, Cuba entiende perfectamente lo que quiso decirnos el poeta salvadoreño Roque Dalton en versos memorables: "Lo peor no es tener miedo. El miedo puede estudiarse como un bicho o como un depósito de estiércol hurgándole con un palito. Lo peor es abrazarse al lastre amargo que las tripulaciones lanzan hacia el fondo del mar, entre aplausos."

Introducción de la ponencia que presenta la autora en el Taller Juventud y Trabajo, del Foro Social Mundial de Porto Alegre, que comienza el próximo 31 de enero)

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